Caso 4B. “La Wi-Fi impide conciliar el sueño”.

No hay evidencias científicas para pensar que la tecnología que permite la conexión Wi-Fi impide conciliar el sueno. La Wi-Fi utiliza en su funcionamiento ondas electromagnéticas no ionizantes que no provocan ningún tipo de alteración el el sueño.

Pero la realidad es que la adicción de ciertos individuos a las nuevas tecnologías hace mucha gente esté conectado a sus pantallas hasta última hora antes de dormir. Sí está comprobado que la luz azul que emiten las pantallas puede dificultar la conciliación del sueño. En este caso la tecnología que utiliza ella Wi-Fi no es el causante de alteraciones sino el mal uso que hacemos de ella.


Imagen de OpenClipart-Vectors en Pixabay

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